Workshop de pinturas y acabados
¡Bienvenidos! a. Ahora vamos de viaje juntos al maravilloso mundo de la pintura y el acabado de muebles. Para aquellos de vosotros que estais familiarizados con mi blog, sabeis que amo, amo, amo los cambios de imagen de los muebles. Soy Restauradora, y mi trabajo consistía en que no se viera mi mano cuando se restaura una pieza antigua, pero a mi me gusta crear, que se note mi paso por esa pieza. Voy a compartir con vosotros algunas de mis técnicas, consejos, trucos, atajos, ideas y cambios de imagen favoritos en las próximas semanas. Avísame si tienes alguna pregunta y trataré de abordarlas en el camino.
Por lo tanto, esta semana os voy a dar consejos de como buscar y comprar piezas buenas para transformar, pintar y acabar, y que el resultado sea espectacular. Esta va a ser sólo mi opinión, habrá gente que no los tocaría, pero vereis como la opción del cambio es buena.
1) Es muy obvio, pero compra piezas que realmente te gusten y te hagan falta. Si comprais una pieza que realmente no os guste del todo, ya sea por precio o por prisa, luego no le dareis el tiempo necesario y el cuidado que necesita. Lo más probable es que lo dejes en el garaje un montón de tiempo hasta que te aburras y lo hagas rápido por terminarlo. Compra de forma inteligente. Este mueble lo compró Marian Parson a muy buen precio y la volvió loca desde que lo vió.
2) Compra piezas de calidad: lo que busco siempre, cajones bien ensamblados, madera maciza y buenas líneas. No compro nada que sea laminado, con grapas o mal hecho. El cambio de imagen será mejor si partimos de una buena base.
3) Saber que tiene una solución económica y que no. Eso al principio no es fácil, pero con el tiempo aprendes a diferenciar. El aparador que muestro abajo la costó a Marian 35 dólares, pero tenía roto el cristal y alguna balda del interior, y ella al igual que nosotras, sabía que era una solución económica. Un cristal y una balda de madera es fácil y barato de obtener. Sin embargo la pieza de arriba le faltaba la pata y eso es más difícil de reparar, sólo hacerla y restaurarlo es más caro.
4) No compres más allá de tus habilidades. Si estás enamorado de una pieza pero esta algo derrumbada o bambolea, no lo compres a no ser que tengas a alguien que te lo sepa restaurar.
Yo como os he dicho al principio soy restauradora, y aunque me ilusiono con todos los muebles que encuentro, tengo que bajar a la realidad y pensar que me va a llevar de tiempo y coste arreglar y que es más factible.
Solo tienes que saber bien en que te estás metiendo y estar preparado para arreglarlo, o tener a alguien que lo arregle ( familiar, amigo o profesional) y luego tu pintar y acabar.
5) Evita comprar piezas que tengan algún defecto de agua (humedad) o que estén astillados. Cuando la madera se comba debido al efecto del agua, tiene que ser reparada y a veces cambiarla entera. Y con la chapa astillada igual. Evito el comprar estas piezas, a no ser que sea una pieza tan importante que merezca la pena ese trabajo.
Por ejemplo a estas dos mesillas de tocador les faltaba a una de ellas la tapa superior, y eso tiene que arreglarse, pero no es muy dificil, sabiendo algo de carpintería, y mirar luego el resultado.
6.) Asegúrate de que la pieza funcione correctamente. ¿La silla se asienta en las cuatro patas? ¿Está el nivel de la mesa? ¿Los cajones se abren y cierran como deberían? ¿Funcionan los pestillos de las puertas? Si no, ¿pueden repararse fácilmente? Arreglar un cajón deformado o pegar una silla tambaleante puede ser muy complicado, así que ten cuidado con el comprador. Además, verifica cualquier trabajo de reparación pasado, especialmente en las patas de la mesa y la silla. Si algo ha sido agrietado y pegado, ten cuidado. La conclusión de comprar muebles es ir con tu instinto, pero sé realista. Es tan fácil enamorarse de una pieza y estar cegado a los desafíos. Siempre es bueno comprar con alguien que pueda contrarrestar tu entusiasmo. Sé paciente y espera por las piezas perfectas.
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